lunes, 23 de febrero de 2009

OSCAR 2009 - MIRAR A LOS OTROS - Luis García Orso

OSCAR 2009: MIRAR A LOS OTROS
Luis García Orso, SJ.

Las películas seleccionadas para los premios Oscar del año pasado 2008 nos reflejaban crudamente una sociedad donde imperan la violencia y el poder económico, el crimen y la corrupción, la degradación moral. O mejor decir una sociedad sin moral. Una nación “sin lugar para los débiles”, para los pobres, para lo que buscan justicia, honestidad, verdad…Así vimos Petróleo sangriento, Sin lugar para los débiles, En el valle de las sombras, entre otras.

Ahora, para los Oscar 2009, los realizadores cinematográficos han querido reaccionar y proponer algunas esperanzas, quizás animados por el final de la era Bush. El camino cinematográfico que han tomado es contar historias y ficciones que nos hagan mirar a los otros, a los diferentes, a los que no están tan cerca de mí. Y así las principales películas de este año tienen como protagonistas a niños huérfanos, niños de la calle, ancianos, inmigrantes, homosexuales, madres de raza negra, trabajadores de limpieza…

Viene aquí la presentación de algunas de estás historias.

Quisiera ser millonario (Slumdog Millionaire) de Danny Boyle, apela a lo más noble, más bello y más poderoso que hay en el corazón de todo ser humano, y que está ahí como fuerza espiritual y como esperanza, más allá de toda condición económica y social, pero que brilla esplendorosa en los pobres; como en Jamal, el joven protagonista, nacido y criado en las calles miserables de Mumbai, y quien junto con su hermano y una niña salen adelante en la vida con el tesón cariñoso de “tres mosqueteros”. La historia que vamos conociendo a través de un concurso televisivo atrapa y anima todo los corazones, y lo hace a través de un jovencito que se sabe las respuestas que la vida le ha dado y que cree y espera por encima de todo, porque hay algo que vale más que veinte millones de rupias. Slumdog Millionaire tiene la chispa y la magia del cine, como pocas películas, y ocho premios Oscar.

El curioso caso de Benjamín Button es una fábula que tiene como protagonista a un niño que nace con el aspecto de un anciano y que muere siendo físicamente un bebé. Un cuento corto de F. Scott Fitzgerald se convierte por David Fincher en una fábula cinematográfica, llena de pequeños detalles y de símbolos, que como toda fábula tiene mucho de lirismo, fantasía, imaginación, mensaje, y que invita a la aceptación de las diferencias de edad, raza, color, religión, identidad; a la aceptación de la vida y su destino, de la salud y la muerte, para hallar fe, amor, esperanza -sin un connotado estrictamente religioso-; para simplemente experimentar que amamos la vida y aprendimos a ser lo que quisimos y pudimos ser.

La duda (Doubt). Son cuatro miradas diferentes a un incidente no comprobado, a una duda: ¿qué pasó en la sacristía entre el Padre Flynn y su pequeño amigo monaguillo? Cuatro miradas que pueden ser la de cualquiera de nosotros: juicio o comprensión, intransigencia o verdad, reclamo o bondad, firmeza o debilidad…La historia en Duda –con un inteligente libreto más teatral que cinematográfico- invita a abrir nuestra mirada y nuestras convicciones a lo que hay en la otra persona: quizás el otro pudiera desarmarnos y nos permitiera alcanzar una verdad que está más allá de una certeza y más cerca del amor y de la condición humana.

Milk. La sólida historia escrita por Dustin Lance Black, resultado de una investigación documental con innumerables testimonios de los protagonistas reales, recorre la lucha y ascensión política y social de Harvey Milk, desde que llegó al barrio Castro de San Francisco en 1972, hasta su asesinato en 1978, siendo concejal de la ciudad y luchador por los derechos de las personas homosexuales. El gran trabajo de Gus van Sant en la narrativa y de la fotografía y la dirección artística consigue una notable recreación de la época, además de un bello testimonio sobre la esperanza como principal arma de lucha contra el rechazo que provoca en algunos la orientación homosexual. En estos tiempos que escuchamos repetidamente decir que no hay más utopías, que todo es cinismo y falta de compromiso, Milk se presenta como una película de un inusitado compromiso político y social, sobre una persona real que decidió cambiar el mundo, empezando por ella misma, y se entregó a defender la dignidad humana de los rechazados sociales.

Sólo un sueño (Revolutionary Road), resulta la otra cara de la propuesta para una mirada esperanzada. Historia desoladora en que unos personajes ahogados en la rutina y en su egoísmo no saben amar ni evolucionar hacia ninguna parte, como reflejo y protagonistas de una sociedad occidental enferma que seduce con el engaño de la comodidad y la prosperidad, de la apariencia y las falsas ilusiones, y deja en la infelicidad y en un “vacío desesperanzado”.
WALL-E es la última y extraordinaria propuesta de Pixar y Disney. Tras 700 solitarios años haciendo aquello para lo que fue construido: limpiar el planeta tierra de tanta basura y contaminación en que ha quedado, WALL-E descubre una nueva misión en su vida cuando se encuentra con un pulcro y perfecto robot explorador femenino llamado Eve (“evaluadora de vida extraterrestre”) y siente la chispa del amor. El viaje de ambos a través de la galaxia –incluidas música y coreografías de Hello, Dolly!- desencadena una de las más emocionantes e imaginativas comedias de aventuras llevadas al cine. Junto a Wall-E, en este fantástico viaje hay un comiquísimo y simbólico elenco de personajes, como una cucaracha mascota y un heroico equipo de robots destartalados, y unos humanos convertidos en mascotas que engordan con comida chatarra mirando la televisión. Estamos ante una fábula conmovedora, tierna y extraordinariamente visual, en que Wall-E es como el Chaplin del siglo XXI.
Entre les murs (La clase), del francés de Laurent Cantet, construye una simbiosis entre la realidad y la ficción en el marco de una escuela de un barrio francés de inmigrantes. Fiel a los principios de la propuesta, el director jamás abandona el perímetro marcado por los muros del centro, en el que seremos testigos privilegiados de los conflictos y discusiones de un profesor entregado a su labor como pedagogo y tutor, y unos alumnos que deben acarrear con los estigmas de su entorno social. Juntos han de aprender –no tan fácilmente- los valores de la democracia, la convivencia, el respeto y los requisitos éticos de todo proceso educativo.

El cine nos ayuda a mirar a personas que se atreven a salir de sí para ir hacia los otros y amarlos, defenderlos, acompañarlos…Estas historias nos siguen recordando que sólo nos encontramos a nosotros mismos rompiendo nuestra cerrazón y abriéndonos a la realidad de los demás, a lo que alguien diferente nos regala; a la gratuidad de la confianza y de la interpelación de otro ser humano, otra cultura, otras esperanzas; a la mirada a los otros que se convierte en solidaridad.

Luis García Orso
México, Febrero 23 de 2009

domingo, 22 de febrero de 2009

Jesuitas de Chile : Historia Activa

Los jesuitas chilenos ha editado una página llamada Historia Activa: aquí encontramos entrevistas y testimonios vocacionales muy interesantes,
de compañeros nuestros de aquella Provincia. Muy recomendable.

http://historiactiva.jesuitas.cl/

miércoles, 18 de febrero de 2009

levántate, recoge tu camilla y vete a tu casa - Max Verduzco

“Pues para que sepan que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra
para perdonar los pecados –le dijo al paralítico-
“Yo te lo mando: levántate, recoge tu camilla y vete a tu casa” Mc.2,1-12
Max Verduzco S.I.

22 febrero 09

Las lecturas hablan de los caminos nuevos del Señor para la humanidad

1ª- Isaías nos invita a estar atentos ante las novedades de Dios: “No recuerden lo pasado ni piensen en lo antiguo; yo voy a realizar algo nuevo. Ya está brotando. ¿No lo notan? Voy a abrir caminos en el desierto y haré que corran los ríos en la tierra árida”.
Para cada época y en corazón de los seres humanos el Señor el Señor va descubriendo las formas nuevas de agradar a Dios y de servir al prójimo.

Sal. “Dichoso el que cuida de los pobres; en los momentos difíciles lo librará el Señor. El lo cuidará y defenderá su vida…El Señor lo confortará en el lecho del dolor y calmará sus sufrimientos”. En la atención a los pobres y necesitados, en tan gran número en estas épocas de guerra y crisis financiera, hay un nuevo y antiguo camino para agradar al Señor y ayudar a los hermanos que sufren.

2ª- San Pablo reafirma la voluntad salvífica de Jesucristo: “No fue primero “si” y luego “no”. Todo él es un “SI”…Nos ha marcado con su sello y ha puesto el Espíritu Santo en nuestro corazón, como garantía de lo que vamos a recibir”.
Jesús ya puso en nuestro corazón al Espíritu Santo. Una de las habilidades que necesitamos desarrollar los cristianos es oír nuestro corazón, y captar las constantes inspiraciones que el Espíritu Santo nos hace. Son los nuevos caminos y las nuevas soluciones que nos propone para los constantes y variados problemas a los que nos enfrentamos cada día. Lo nuevo nos lo ofrece el Espíritu Santo.

El Evangelio relata la aventura del paralítico que, en Cafarnaún, fue bajado a través del techo por los cuatro intrépidos que los llevaban en camilla.
Novedoso fue el método que usaron para ponerlo ante Jesús y novedosa fue su respuesta: “Hijo, tus pecados te quedan perdonados” Sin necesidad de ritos o sacrificios el Señor perdona los pecados. Lo hace sólo por su bondad, por su fidelidad-amor y por la fe de aquellos hombres que se atrevieron a hacerlo.
La pregunta de los escribas es correcta: “¿Quién puede perdonar los pecados sino sólo Dios” Aunque ni el milagro de Jesús los convenció que Dios estaba en medio de ellos.
Jesús continuó: “Pues para que sepan que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar los pecados, -le dijo al paralítico-: “Yo te lo mando: Levántate, recoge tu camilla y vete a tu casa”.
El hombre se levantó inmediatamente, recogió su camilla y salió de allí a la vista de todos… Decían: “Nunca habíamos visto cosa igual”

La novedad de Jesús está en que desde la tierra nos perdona todos los pecados. Pidamos al Señor que estemos abiertos a las novedades que Jesús nos presenta y no nos mantengamos aferrados, solamente, a fórmulas del pasado. En casi todo avanzamos pero en religión aparece la tendencia de ver atrás. Que el Señor nos conceda seguir las inspiraciones de su Espíritu. Que así sea.

martes, 17 de febrero de 2009

SÓLO UN SUEÑO (REVOLUTIONARY ROAD) - Luis García Orso

SÓLO UN SUEÑO (REVOLUTIONARY ROAD)
Luis García Orso, SJ.

Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, la pareja idealizada en la empalagosa y triunfadora historia del Titanic, vuelve a reunirse once años después, ahora como un matrimonio común norteamericano de 1955 que pretende sacar adelante sus ilusiones y sólo conseguirá exhibir sus más amargas frustraciones y sucumbir a otro naufragio, mucho más real y sin la menor pizca de sensiblería tramposa. Sólo la frustración que genera una sociedad –y así toda familia y toda persona- cimentada en el egoísmo y en la vacuidad.

Frank y April Wheeler se conocen poco después de terminar la Segunda Guerra Mundial, se enamoran a la primera y se casan. Guapos, jóvenes y con talento, se diría que componen el matrimonio perfecto. Son “gente especial” que se merece una linda casa en Revolutionary Road, no en las calles para gente común y corriente. Pero diez años después, y a pesar de que tienen dos hijos preciosos, su relación se ha anquilosado y se viene abajo. Ella ha conocido el fracaso de su carrera como actriz, y quedarse sólo en el hogar no la hace feliz; él tiene un trabajo gris de oficinista en el piso 15, con pocos alicientes, imitación de los veinte años que su padre trabajó en la misma empresa. La felicidad perfecta que debía embargarles, el sueño americano hecho realidad, no existe. ¿Qué hacer para volver a ilusionarse?

Adaptación de la novela homónima de Richard Yates, profesor universitario y guionista en Hollywood en los 60, Revolutionary Road se trató de filmar en aquella época y nadie se atrevió a producirla: les confrontaba y agredía demasiado. Se trata de una crónica del desamor, una mirada tremendamente pesimista a los Estados Unidos de los años 50 – pero que sigue tan actual- donde tras la fachada de una vida ideal se ocultan la frustración, el vacío, la desesperación paralizante. Historia desoladora en que unos personajes ahogados en la rutina y en su egoísmo no saben amar ni evolucionar hacia ninguna parte, como reflejo y protagonistas de una sociedad occidental enferma, que seduce con el engaño de la comodidad y la prosperidad, y deja en la infelicidad y en un “vacío desesperanzado”. Paradójicamente, un joven enfermo mental se convierte en el profeta que de pronto aparece para sacar a luz la verdad de lo que se vive.

Sam Mendes toma un guión perfecto y dirige con maestría una tragedia sin dejar espacio a la catarsis y a la complacencia, dejando que los personajes evolucionen desde su realidad y con todas sus amargas consecuencias. La temática nos conecta con la mejor tradición dramática de ¿Quién teme a Virginia Woolf? (Mike Nichols, 1966), Gente como uno (Ordinary People, Robert Redford, 1980), y Belleza Americana (Sam Mendes, 1999). Leonardo DiCaprio y Kate Winslet dan su mejor actuación hasta ahora, y la narrativa luce además con una acertada iluminación de colores pastel deslavados y con la sobria música de Newman.

En el espléndido final de la historia, cuando nuevamente la simbólica mujer vendedora de apariencias dice que ha encontrado al mejor matrimonio de “gente bonita y triunfadora” para habitar una casa en Revolutionary Road, ya sabemos –tristemente- que es tiempo de apagar el sonido y dejar que la mujer siga hablando sola. Al cabo, todo es sólo un sueño… tan amargo como mentiroso.

Luis García Orso
México, Febrero16 de 2009

lunes, 9 de febrero de 2009

DIOS ACOGE A LOS «IMPUROS» - José Antonio Pagola

DIOS ACOGE A LOS «IMPUROS» - José Antonio Pagola
Marcos 1, 29 - 39

15 de febrero de 2009 / 6 Tiempo Ordinario (B)

De forma inesperada, un leproso «se acerca a Jesús». Según la ley, no puede entrar en contacto con nadie. Es un «impuro» y ha de vivir aislado. Tampoco puede entrar en el templo. ¿Cómo va a acoger Dios en su presencia a un ser tan repugnante? Su destino es vivir excluido. Así lo establece la ley.

A pesar de todo, este leproso desesperado se atreve a desafiar todas las normas. Sabe que está obrando mal. Por eso se pone de rodillas. No se arriesga a hablar con Jesús de frente. Desde el suelo, le hace esta súplica: «Si quieres, puedes limpiarme». Sabe que Jesús lo puede curar, pero ¿querrá limpiarlo?, ¿se atreverá a sacarlo de la exclusión a la que está sometido en nombre de Dios?

Sorprende la emoción que le produce a Jesús la cercanía del leproso. No se horroriza ni se echa atrás. Ante la situación de aquel pobre hombre, «se conmueve hasta las entrañas». La ternura lo desborda. ¿Cómo no va a querer limpiarlo él, que sólo vive movido por la compasión de Dios hacia sus hijos e hijas más indefensos y despreciados?

Sin dudarlo, «extiende la mano» hacia aquel hombre y «toca» su piel despreciada por los puros. Sabe que está prohibido por la ley y que, con este gesto, está reafirmando la trasgresión iniciada por el leproso. Sólo lo mueve la compasión: «Quiero: queda limpio».

Esto es lo que quiere el Dios encarnado en Jesús: limpiar el mundo de exclusiones que van contra su compasión de Padre. No es Dios quien excluye, sino nuestras leyes e instituciones. No es Dios quien margina, sino nosotros. En adelante, todos han de tener claro que a nadie se ha de excluir en nombre de Jesús.

Seguirle a él significa no horrorizarnos ante ningún impuro ni impura. No retirar a ningún «excluido» nuestra acogida. Para Jesús, lo primero es la persona que sufre y no la norma. Poner siempre por delante la norma es la mejor manera de ir perdiendo la sensibilidad de Jesús ante los despreciados y rechazados. La mejor manera de vivir sin compasión.

En pocos lugares es más reconocible el Espíritu de Jesús que en esas personas que ofrecen apoyo y amistad gratuita a prostitutas indefensas, que acompañan a sidóticos olvidados por todos, que defienden a homosexuales que no pueden vivir dignamente su condición… Ellos nos recuerdan que en el corazón de Dios caben todos.

Extiende tu mano hacia los rechazados. Pásalo

José Antonio Pagola: buenasnoticias@terra.es

sábado, 7 de febrero de 2009

viernes, 6 de febrero de 2009

GreenPeace busca ciberactivistas

¡Actúa ahora!



El ciberactivismo es una de las principales herramientas de participación con las que contamos. Es vital exigir soluciones inmediatas a los responsables de los abusos contra el medio ambiente.

La denuncia masiva por correo electrónico es una herramienta de éxito probada. Alrededor del mundo, Greenpeace ha tenido grandes logros a través de ésta. Junto con Greenpeace, tú también puedes ser parte activa de nuestras propuestas, acciones y denuncias.

Gracias a la participación de miles de personas hemos logrado detener la tala de bosques en muchas regiones del planeta, promover importantes leyes en contra de la contaminación y mantener la prohibición sobre la caza comercial de ballenas, entre otros logros.

¡Inscríbete como ciberactivista aquí !

http://www.greenpeace.org/mexico/participa-como-ciberactivista

jueves, 5 de febrero de 2009

Vamos a los pueblos cercanos para predicar - Max Verduzco S.I.

“Jesùs les dijo: Vamos a los pueblos cercanos para predicar tambièn
allà el Evangelio, pues para eso he venido” Mc1,29-39

8 febrero 09 Max Verduzco S.I.


Las lecturas nos hablan de nuestra corta estancia en la tierra y de la predicación del Evangelio.

1ª- El viejo y reflexivo Job nos recuerda que nuestra vida, nuestra estancia sobre esta tierra es “un soplo”, algo que transcurre muy brevemente y “Mis dìas corren màs aprisa que una lanzadera y se consumen sin esperanza”
Parece que tuvo una visiòn de de lo que nos sucede en la actualidad. Nuestros dìas corren ràpidamente entre muchas actividades, planeadas o urgentes. Estamos en un ir y venir incesante, casi sin sentido, y muchos de ellos “se consumen sin esperanza”
Indirectamente nos invita a revisar nuestra actividad y el sentido o esperanza que tenemos en ella.

Sal. “El Señor sana los corazones quebrantados y venda las heridas, tiende su mano a los humildes y humilla a los malvados (algo que no vemos seguido)

2ª- San Pablo està contento, satisfecho, de realizar la misiòn que le confiriò el Señor: predicar el Evangelio, la Buena Noticia de Jesús. Lo hace con alegrìa y gratuitamente. Se goza en participar lo que ha descubierto. Comunica a los demàs la nueva visiòn que le fue dada. “Se hace todo a todos, a fin de ganarlos a todos. “Todo lo hace por el Evangelio”… Para anunciar la Buena Nueva que es para toda la humanidad, Jesucristo.
Ojalà, tambièn, nosotros comuniquemos a los demàs la alegrìa y gozo que tenemos al sabernos amados, apreciados y apoyados por Nuestro Señor Jesucristo.

El Evangelio relata los inicios de la vida pùblica de Jesús. Predica en la Sinagoga de su pueblo, cura a la suegra de Pedro y a los enfermos y poseìdos del demonio que le llevaron a la casa.
Tambièn sacaba tiempo para levantarse, ir a un lugar solitario y ponerse a orar.
En medio de todas las actividades, Jesús nunca perdiò el rumbo. Sacaba tiempo para mantenerse en comunicación con Dios su Padre y ante El confrontar y reorientar su vida. Ahì tomo la determinación:
“Vamos a los pueblos cercanos para predicar tambièn allà el Evangelio, pues para eso he venido”
Jesús va ampliando el horizonte de su acciòn. Empezò en su pueblo, luego por los pueblos cercanos, después por toda Galilea y Palestina y finalmente a toda la humanidad. Su mensaje y acciòn salvadora es para todos.

Pidamos al Señor que tengamos la capacidad de detenernos para no seguir como “lanzaderas” de un lado al otro si8n pararnos sino que tengamos la capacidad, como Jesús, de detenernos, sacar ratos, en el dìa o en la noche, para hacer oraciòn. Preguntar al Padre sobre el sentido y orientación de nuestra propia vida. La respuesta que obtengamos serà la Buena Noticia que podremos comunicar espontánea y libremente a los demàs. Les podremos comunicar que Dios Bueno los quiere y se preocupa de ellos. Que asì sea